la crisis

Llegué al edificio poco después de las once de la mañana. Subí la escalera de la entrada y atravesé las enormes puertas correderas, de cristal, y a unos tres metros me encontré con el mostrador de recepción en el que había una mujer con el auricular del teléfono en la mano izquierda, mientras con la derecha tomaba notas..... Esperé a que terminara y se dirigiera a mí preguntándome que deseaba. Le expliqué el asunto  que me había llevado hasta la Administración y al instante me indicó la ruta a seguir para localizar el despacho al que debía dirigirme para resolver mi problema......... Después de unos minutos, y mientras la empleada que me atendía hacía unas fotocopias, oí un gemido enorme, más bien parecía un enorme gruñido con palabras intercaladas que sonaban pero no entendía. La empleada y yo levantamos la mirada al unísono, a modo de pregunta  sobre  ¡qué era aquello?.... Sin mediar palabra ella continuó grapando las copias y yo callé con la incógnita en la garganta. El sonido vilvió a sonar y ésta vez acerté a comprender que era un sonido agudo entre el lamento y el llanto aderezados los dos con desasosiego...La empleada se levantó con espanto de su sillón y yo me levanté de la silla con verdadera agustía.... Al salir del despacho y mirar al pasillo, la empleada comprende de una vez ,y se da media vuelta de regreso a su sitio, pero yo no comprendo nada y quedo paralizada allí mismo, pensando que a aquella mujer le podría estar dando un colapso o algo parecido. Alguien gritó  que había que avisar a una ambulancia, a los servicios de emergencia, dije yo, mientras la mujer se retorcia en el suelo y todos oímos el timbre de su movil desde el interior de un bolso, tirado en el suelo como ella..... ¡Es mi niña.... mi niña! exclamó la mujer al tiempo que comenzó a derramar desesperación con todo su cuerpo, le dieron espasmos y yo pensé que se moría allí mismo....¡Mi niña.... mi niñña! , aullaba continuamente..... Yo sin saber nada, comprendía que algo muy grave le estaba pasando a ella o a su niña. Alguien descolgó el movil y le avisó que su madre tenía una crisis en aquella oficina por lo que sería conveniente que acudiera....... Cuando llegó la niña, nos dijo que tenía 16 años y cargaba contra su pecho un  bebé de 20 días... Yo me quedé estupefacta mientras todos intentábamos que la mujer pudiera respirar con total normalidad para que se incorporara.....y apareció la máxima autoridad de aquel lugar.....¡ Mira, le dijo la mujer muy aira, miralá, ahí la tienes, ahora se lo dices a ella, y no a mí, y a ver ahora como va a alimentar a su hija sin los 400 euros que nos has quitado... ¡¡sivergüenza, que eres un sinvergüenza!!.  La autoridad le dijo a cada uno que se fueran a sus puestos "que esto ya está resulto"..... Yo cogí mis fotocopias y me encaminé hacia la salida, pero en el trayecto la autoridad tuvo  la deferencia de explicarme el motivo por el que se le había retirado la ayuda.... Dije que sí a todo y salí lo mas apresuradamente que pude para no caer en la tentación de justificar lo injustificable.